- Ansiedad: Al contrario de lo que pensamos, el té sirve para combatir nuestra ansiedad. El contenido de aminoácidos en el té es beneficioso para calmarla. La teanina del té es antiestresante, regula los niveles de dopamina y de serotonina y mejora la memoria, la capacidad de aprendizaje y el control de las emociones. La teína nos ayuda a cambiar de humor y reduce los síntomas de ansiedad al cabo de treinta minutos de tomar una taza de té. Psicológicamente el mero hecho de preparar tranquilamente un té, ayuda a relajarse.
- Depresión: En la medicina tradicional china se aconseja el consumo de té para aliviar los síntomas depresivos, pues el ligero poder estimulante de la teína ayuda al organismo a combatir el decaimiento y el cansancio por sobreesfuerzo. Sin embargo no es conveniente abusar de su consumo excesivo si se tiene alguna dolencia cardíaca.
- Asma: La teína contenida en el té puede mejorar el flujo de aire hacia los pulmones, la broncodilatación. Sin embargo, no es conveniente abusar de más de cuatro tazas diárias de té verde para no alterar el sistema nervioso y el sueño.
- Cálculos renales: Para prevenir la formación de depósitos o cálculos renales es indispensable beber muchos líquidos, y si en nuestra dieta incluimos dos tazas de té al día, mejoraremos las funciones del riñón; de esta manera podemos evitar los cólicos nefríticos. Igualmente, el consumo excesivo de té puede dificultar la asimilación de algunos minerales.
- Cistitis: Los componentes del té protegen las células de la vejiga, de modo que beber diariamente al menos cuatro tazas de té verde nos protegerá de infecciones urinarias como la cistitis. Si la dolencia ya se ha manifestado, el consumo de té calmará el dolor debido al poder antiinflamatorio y analgésico de sus componentes.
- Retención de líquidos: Esta dolencia aparece cuando existe un desequilibrio en el nivel de líquidos del organismo, o porque los vasos linfáticos son incapaces de transportar los liquidos sobrantes. La ingesta de té es favorable porque aumenta la micción (se orina más cantidad y con más frecuencia), lo cual elimina gran cantidad de líquido corporal.
- Hepatitis: La hepatitis es una inflamación del hígado provocada por su mal funcionamiento. Consumir tres tazas diarias de té verde constituye una importante fuente de protección contra los virus que pueden afectar al hígado, además el té contiene un nutriente, la colina, que favorece la eliminación de grasa del hígado.
- Colesterol: El colesterol es necesario para el organismo, pero en exceso es un riesgo para la salud. Varios componente del té favorecen la disminución del colesterol y los triglicéridos, con lo que se impide la formación de trombos y la obstrucción de arterias.
- Diarreas: El contenido en catequinas, acido tánico y zinc del té lo hacen astringente, es decir, capaz de absorber líquidos del organismo, con lo que disminuye la cantidad de deposiciones.
- Infecciones estomacales: El té activa la producción de enzimas acelerando el metabolismo del hígado y facilitando la digestión. Los componentes del té aumentan la resistencia a los parásitos intestinales y combaten las infecciones estomacales.
- Intoxicaciones: Tomando té se reducen los efectos tóxicos del tabaco o el alcohol, o al menos, pueden retrasarse sus efectos. Ante una intoxicación por gas tomaremos una taza de té fuerte con vinagre.
